Captación de clientes a través de contenido que resuelva sus necesidades.
Si te interesa el mundo del marketing digital necesitas saber qué es el Inbound Marketing. En este artículo vas a aprender más acerca del Inbound Marketing para descubrir todos los beneficios que tiene para cualquier empresa.
El Inbound Marketing es una metodología comercial que consiste en la captación de clientes a través de la creación de un contenido de valor que sea capaz de resolver sus necesidades. Se trata de un tipo de marketing que tiene mucho éxito debido a que es de lo más natural y no resulta para nada invasivo para el consumidor, lo cual este agradece.
El Inbound Marketing incorpora diferentes técnicas de publicidad y de marketing digital para poder comunicarse con el usuario desde el principio de su proceso de compra hasta la conversión final acompañándolo por todo el recorrido.
Mediante el contenido que crea el Inbound Marketing se pretende atraer al usuario y convencerlo para que se lleve a cabo la compra y, en estos casos, es imprescindible que el contenido sea de valor. El Inbound Marketing acompaña al consumidor por todo el camino y siempre lo hace desde una forma amigable hasta que se produce la transacción final.
Conocer los beneficios del Inbound Marketing nos permitirá estar mucho más motivados de cara a llevar a cabo este tipo de campañas. Vamos a verlos.
Lo primero que debemos conocer es que el Inbound Marketing es un gran generador de leads. Para hacerse una idea de la importancia que tiene, según diferentes estudios el Inbound Marketing es capaz de generar un lead cualificado y 12 registros cada vez que se producen 370 visitas.
Sus cifras son todavía más asombrosas si tenemos en cuenta que, según dichos estudios, es posible duplicar los contactos de marketing cualificados por dos en un año natural y multiplicarlos por siete cuando se trata de dos años. Por supuesto, también es capaz de aumentar las visitas en una página web multiplicándolas de forma exponencial con el paso de los años.
El Inbound Marketing es una estrategia de largo recorrido, es decir, sus beneficios más notables se llevan a cabo a largo plazo. En este largo plazo se puede posicionar mucho mejor el contenido de calidad que se ha creado y también se consigue una base de datos que crece con el paso del tiempo.
Gracias al Inbound Marketing conseguimos mejorar el alcance de nuestra empresa y también reforzamos la imagen de marca. Finalmente, gracias a todas estas ventajas se consigue una automatización del marketing a través de la cual se da lugar a un ahorro de recursos de forma permanente.
Podemos llevar a cabo una estrategia de Inbound Marketing en tan solo 5 pasos. Vamos a ver cada paso por separado para que no tengas problemas en aplicarla en tu empresa si es lo que necesitas.
Lo primero que debemos hacer a la hora de plantear una estrategia de Inbound Marketing es tener muy claro el entorno de nuestra oferta. Si vamos a lanzar un nuevo producto al mercado es importante que podamos crear contenidos de alto valor sobre el tipo de producto en cuestión.
Este contenido implica que podamos hablar bien del producto, resolver cualquier duda que pudiera tener el cliente o mostrar bien los beneficios del mismo. Durante esta etapa debemos considerar el enviar muestras gratis para probar el producto, hacer uso de emailing para conocer las opiniones de los usuarios, crear guías… cada una de las ofertas con su propia landing page para poder medir las descargas o las visitas y contar con unas buenas métricas.
Como en cualquier otra estrategia que vayamos a hacer es importante establecer los objetivos que queremos conseguir. Además de realistas, estos objetivos deberán de adaptarse a un periodo de tiempo. De forma habitual las campañas suelen durar entre 30 y 90 días. Durante todo este tiempo trabajaremos la forma de comunicación para hacer que nuestro contenido se vuelva viral.
Con el tiempo, nuestro contenido se posicionará en internet y este aspecto estará trabajado. Esta es una de las ventajas del Inbound Marketing, ya que nuestro contenido permanecerá en la red y este seguirá proporcionándonos todas las ventajas posibles que harán que nuestros productos se sigan vendiendo bien.
El tercer aspecto será evaluar cómo vamos a conducir el tráfico. Tenemos diferentes formas por las que podemos optar para que el tráfico vaya llegando a nuestra página y, por lo tanto, podamos dar a conocer nuestros productos.
Como si se tratase de una inversión, a la hora de redirigir el tráfico la diversificación es clave. Podemos atraer tráfico a través de contenido de calidad en un blog y, por supuesto, apoyar su difusión en las redes sociales.
También podemos aprovechar técnicas de email marketing para llegar a más contactos a través del correo electrónico y, no debemos de olvidar nunca la publicidad pagada. Si tenemos un presupuesto para nuestra campaña de marketing poder conseguir unas cuantas visitas más a cambio de unos pocos euros es una buena opción.
Cuando estamos llevando a cabo una campaña de Inbound Marketing debemos tener muy claro que lo que estamos trabajando es el valor, no una conversión inmediata. Como hemos explicado, en la gran mayoría de los casos el éxito llega con el paso del tiempo, por lo que el cliente irá madurando la decisión conforme haya conocido nuestro contenido.
Trabajar ese cliente maduro es clave para la empresa. Debemos tratarlo con cuidado, agradeciendo su tiempo e informándolo si está interesado. No debemos caer en el error de forzar la situación y obligarlo a comprar. Si ves que el cliente se muestra receptivo es el momento de facilitarle todo lo que necesite hasta que finalmente materialice su compra.
Finalmente, una vez finalizada la campaña, es importante hacer un informe acerca de cómo ha ido. En este informe deberás tener en cuenta las visitas que has obtenido, así como los leads o los nuevos clientes que has conseguido.
Conocer todo esto te permitirá saber el grado de éxito de tu campaña y, a posteriori, tratar de evaluar qué aspectos se deben repetir en busca de ese éxito o cuáles debemos reforzar. Conocer el resultado de nuestra campaña es fundamental de cara a futuras decisiones.